En realidad, la oveja manchega puede ser: blanca (la mayoría), con las mucosas despigmentadas o negra, con manchas claras en cabeza y partes distales de su anatomía. La variedad, sin embargo, no establece diferencias de calidad en la leche que producen.
En la extensión de todo este territorio se ha creado una industria quesera con una riqueza y personalidad propias, que han hecho de Castilla-La Mancha una tierra con quesos de fama mundial y, también, con Denominación de Origen.
Si quieres descubrir lo que te espera en el corazón de la Mancha, prepárate porque nos vamos de ruta quesera. ¡Comienza la Ruta Manchega del queso!
La Ruta manchega por 7 destinos
Campo de Criptana (Ciudad Real)
Al ser una región llena de contraste, coexisten sierra y llanura, los pastos son de gran variedad, como sus quesos. Por lo que es una oportunidad para comenzar a picotear y explorar la riqueza de este territorio digno de novelas de caballerías.
Alcázar de San Juan (Ciudad Real)
El municipio es uno de los principales puntos de elaboración del queso manchego, donde su elaboración artesanal se conserva. De hecho, en este mismo pueblo se elaboraron en 1962 nuestros primeros quesos en manos del propio Hersilio García Baquero. Si deseas conocer más sobre la historia y tradición añeja de nuestros quesos, puedes visitar nuestra tienda y descubrir todos nuestros productos.
Tomelloso (Ciudad Real)
El campo y las huertas tienen mucha importancia en la gastronomía manchega. En Tomelloso podrás degustar recetas y platos típicos de la zona, como el pisto manchego o la caldereta de cordero, con un buen pan de pueblo para mojar. Sin lugar a dudas, esta región tiene sus puertas abiertas a aquellos viajeros que prefieren sumergirse entre esencias y sabores que evocan recuerdos inolvidables.